Con el empate Lanús se coronó primero, mientras que en la Paternal Tigre cayó ante el Bicho y cerró una gran temporada. por Juan Pianzola
Para ellos el campeonato ya terminó, adelantaron el final una semana. ¿Hubiese cambiado en algo esperar? No lo creo, solo se hubiera estirado el desenlace. Por el lado de Boca, con algunas variantes se dispuso a jugar ya fuera de competencia y con los ojos puestos en Japón. Del lado visitante, la ansiedad y el nerviosismo se hacían notar. Al mismo horario en la Paternal el escolta Tigre visitaba a Argentinos con la ilusión de que el Xeneixe le gane al Granate y así definir el torneo con un partido definitorio. Los de Gorosito, que pasaron una semana de polémicas declaraciones, buscaban mantener el invicto en casa. Arrancaron al mismo tiempo y en el banco granate la radio era la conexión directa con el Diego A. Maradona. El puntero tuvo la primera situación y fue Caranta sacando a relucir su fuerte personalidad el que impidió que los de Cabrero hicieran la diferencia. Entre Silvestre y Paletta se repartían la marca del “Pepe” Sand, que jugó bien, estuvo atento y participativo del circuito en ataque.
A los 2800 hinchas visitante que llegaron desde la República de Lanús, que se bancaron la hostilidad de la policía, que se bancaron el calor, que se acurrucaron en el espacio reducido que les cedió el local, a ellos les iba a llegar su momento de felicidad. El reloj marcaba 25´ del primer tiempo cuando Sand conectó el centro de la izquierda saltando más que sus marcadores y cabeceo al palo de Caranta. Explosión en la tercer bandeja y también en el estadio de Lanús, si, aquellos que no pudieron ver al granate en la bombonera se acomodaron en su estadio con una pantalla gigante a disposición y deliraron a grito de “dale campeón”.
La cosa no estaba resuelta aún, en la Paternal el bichito manejaba el partido y no parecía correr riesgo alguno. Cómo iba el partido de Lanús preguntaba un hincha de Tigre, 1 a 0 se escuchó, el milagro parecía imposible. Y más aún cuando sobre los 15´ST Delorte cae en el área y el árbitro sanciona penal. Estaba clavado que no sería la tarde de los de victoria. Barzola se adueño del tiro penal y con serenidad la colocó sobre el palo izquierdo de Cambiasso, Parecía sentenciado quien sería el campeón. Volviendo a la Boca, los de Russo empezaron a arrimarse al arco de Bossio, Bueno tuvo las mejores situaciones de gol, las desaprovechó y fue reemplazado por Boselli. Llegando a los 20 del St Palermo combina con Boselli y es el alto el que define y pone el empate definitivo. Sólo había que esperar el final. En ese momento nadie se puso a pensar que el proyecto que empezó en Agosto de 2005 iba a funcionar, mucho trabajo, constancia, iban a dar resultado, solo se vivía la emoción de alcanzar por primera vez un Campeonato. Y fue cuando el árbitro del partido pitó el final que los pocos que estaban en el campo estallaron en un solo grito de “somos campeones”, increíble desenlace para este club que se fue formando con pibes del club y hoy es un claro ejemplo institucional. Tigre se lleva su reconocimiento por la campaña brillante que realizó, pero hoy se vive en Lanús esa sensación hermosa de ser el mejor. Brindo por Lanas. ¡¡¡Salud CAMPEÓN!!!!
Para ellos el campeonato ya terminó, adelantaron el final una semana. ¿Hubiese cambiado en algo esperar? No lo creo, solo se hubiera estirado el desenlace. Por el lado de Boca, con algunas variantes se dispuso a jugar ya fuera de competencia y con los ojos puestos en Japón. Del lado visitante, la ansiedad y el nerviosismo se hacían notar. Al mismo horario en la Paternal el escolta Tigre visitaba a Argentinos con la ilusión de que el Xeneixe le gane al Granate y así definir el torneo con un partido definitorio. Los de Gorosito, que pasaron una semana de polémicas declaraciones, buscaban mantener el invicto en casa. Arrancaron al mismo tiempo y en el banco granate la radio era la conexión directa con el Diego A. Maradona. El puntero tuvo la primera situación y fue Caranta sacando a relucir su fuerte personalidad el que impidió que los de Cabrero hicieran la diferencia. Entre Silvestre y Paletta se repartían la marca del “Pepe” Sand, que jugó bien, estuvo atento y participativo del circuito en ataque.
A los 2800 hinchas visitante que llegaron desde la República de Lanús, que se bancaron la hostilidad de la policía, que se bancaron el calor, que se acurrucaron en el espacio reducido que les cedió el local, a ellos les iba a llegar su momento de felicidad. El reloj marcaba 25´ del primer tiempo cuando Sand conectó el centro de la izquierda saltando más que sus marcadores y cabeceo al palo de Caranta. Explosión en la tercer bandeja y también en el estadio de Lanús, si, aquellos que no pudieron ver al granate en la bombonera se acomodaron en su estadio con una pantalla gigante a disposición y deliraron a grito de “dale campeón”.
La cosa no estaba resuelta aún, en la Paternal el bichito manejaba el partido y no parecía correr riesgo alguno. Cómo iba el partido de Lanús preguntaba un hincha de Tigre, 1 a 0 se escuchó, el milagro parecía imposible. Y más aún cuando sobre los 15´ST Delorte cae en el área y el árbitro sanciona penal. Estaba clavado que no sería la tarde de los de victoria. Barzola se adueño del tiro penal y con serenidad la colocó sobre el palo izquierdo de Cambiasso, Parecía sentenciado quien sería el campeón. Volviendo a la Boca, los de Russo empezaron a arrimarse al arco de Bossio, Bueno tuvo las mejores situaciones de gol, las desaprovechó y fue reemplazado por Boselli. Llegando a los 20 del St Palermo combina con Boselli y es el alto el que define y pone el empate definitivo. Sólo había que esperar el final. En ese momento nadie se puso a pensar que el proyecto que empezó en Agosto de 2005 iba a funcionar, mucho trabajo, constancia, iban a dar resultado, solo se vivía la emoción de alcanzar por primera vez un Campeonato. Y fue cuando el árbitro del partido pitó el final que los pocos que estaban en el campo estallaron en un solo grito de “somos campeones”, increíble desenlace para este club que se fue formando con pibes del club y hoy es un claro ejemplo institucional. Tigre se lleva su reconocimiento por la campaña brillante que realizó, pero hoy se vive en Lanús esa sensación hermosa de ser el mejor. Brindo por Lanas. ¡¡¡Salud CAMPEÓN!!!!
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